Pidiendo y recibiendo de Dios
La biblia nos enseña que pedirle a Dios no es malo, incluso a lo largo del libro sagrado encontraremos varias promesas que Él nos hace para que al pedir podamos recibir.
Es importante aprender, memorizar estas promesas para que podamos recitarlas al momento de orar.
El próximo es un ejemplo de cómo usar las promesas en el momento de orar.
Señor hoy vengo delante de ti, reconociendo tu señorío en mi vida. Dándote las gracias por la infinidad de bendiciones que derramas sobre mi, y por cada promesa en tu palabra. Pidiendote perdon por todo aquello que conciente e inconcientemente pude haber dicho o hecho que ha herido tu corazón. Hoy, te pido por _____________ creyendo "que todo lo que pidais en oracion creyendo os será hecho" (Mateo 21:22). Lo hago aferrada a tu promesa, "clama a mí y yo te respondere" (Jeremias 33:3). Por que tu me has enseñado que "si permaneces en mi palabra, y mi palabra permanece en ti, pedid lo que querais y os será hecho" (Juan 15:7) y yo creo en tu palabra y permanezco en tus promesas. Lo pido en tu "nombre para que el Padre sea glorificado" (Juan 14:13-14). Con esta confianza vengo delante de ti "que si pedimos cualquier cosa conforme a tu voluntad, El nos oye" (1 Juan 14:!5). Por eso "todas las cosas que pidais, creed que las habeis recibido y os serán" (Marcos 11:24). Por eso te doy gracias por el si y amen de tus promesas. Por que me exhortas a pedir, "pedid y no recibis por que pedir mal para gastar en vuestros deleites" (Santiago 4:3) y hoy pido sabiduria para pedir, y sobre todo pido que antes de mi voluntad, se cumpla tu voluntad.
